Revista Electrónica de Investigación Educativa
Vol. 10, Núm. 1, 2008
Avances en la investigación sobre la enseñanza
de lenguas extranjeras en las IES de 15 estados de la
República Mexicana (2000-2005)
Obra reseñada:
¿Los profesores de lenguas extranjeras están preparados para investigar sobre su propia práctica? ¿Los programas de formación docente en el área de la enseñanza de lenguas fomentan la investigación? ¿Qué actores han emprendido estudios que propicien el avance en la enseñanza aprendizaje de lenguas en nuestro país? ¿Cómo se difunden los resultados de la investigación en el área de las lenguas extranjeras en nuestro país? Las respuestas a estas y otras preguntas se develan mediante la lectura del libro que aquí se reseña. En los discursos académicos y políticos se habla de la necesidad de mejorar la educación y la investigación en el país, aun cuando la asignación de recursos para ambos rubros es todavía insuficiente. Sólo la creatividad, tenacidad y capacidad para crear sinergias de los propios docentes-investigadores en contextos específicos permiten que nuestro país avance en tales ámbitos, aunque no con la velocidad que exige la globalidad. Un ejemplo de ello es este libro recientemente publicado con la participación de varias instituciones de educación superior (Universidad de Sonora, Universidad del Altiplano, Universidad de Colima, Universidad Autónoma de Baja California, Universidad Autónoma de Chiapas, Universidad de Quintana Roo y la Universidad Autónoma de Tamaulipas), y editado por Plaza y Valdés. Para su publicación, 37 profesores-investigadores, 16 responsables y 21 colaboradores de 11 instituciones de educación superior se dieron a la tarea de recopilar la información sobre productos de investigación del área de lenguas extranjeras en 15 estados, número que equivale a 47% de las entidades federativas. Bajo la atinada coordinación de José Luis Ramírez, en forma colaborativa, lograron revisar 494 trabajos, seleccionando un total de 264, conforme a criterios geográficos, temporales, temáticos, por tipos de objetivos de los trabajos y por tipos de formato. Un esfuerzo enorme, si se tiene en cuenta que la mayoría de ellos no son profesores de tiempo completo ni cuentan con horas para investigación. En la introducción del libro Las investigaciones sobre la enseñanza y el aprendizaje de lenguas extranjeras en México, su coordinador explica la génesis del proyecto como sigue: Buscando sumarse a esfuerzos anteriores -por conocer información sistematizada respecto a la investigación generada en este siglo- y actualizar la información disponible, el coordinador de este estudio incitó a profesores e investigadores del área de la enseñanza de lenguas extranjeras a documentar y analizar las investigaciones sobre los procesos de enseñanza-aprendizaje de lenguas extranjeras realizadas en los últimos años en sus instituciones y estados, a fin de generar información sobre qué se investigaba en el área, quiénes y cómo lo hacían y qué resultados habían obtenido, en la esperanza de incidir en la mejora tanto de la propia investigación como de los procesos de enseñanza-aprendizaje en esta área (p. 14). El volumen contiene tres partes: I. Contexto de la investigación (2 capítulos); II. El panorama por estados (11 capítulos); III. Resultados y evaluación (2 capítulos). En el primer capítulo, Encinas, Busseniers y Ramírez abordan el panorama de la conformación y consolidación del área de la enseñanza y del aprendizaje de lenguas extranjeras y el desarrollo de la investigación en México. Destacan los seis indicadores o lo que ellos llaman detonadores de tal conformación: 1) los programas de formación, licenciatura y posgrado; 2) las asociaciones y foros profesionales; 3) los eventos académicos; 4) las publicaciones en el área; 5) las redes de colaboración, y 6) las tres instituciones pioneras en investigación (Universidad Nacional Autónoma de México, Universidad Autónoma Metropolitana y Universidad de las Américas en Puebla). En el segundo capítulo, Ramírez describe el propósito de la investigación, los procedimientos y criterios seguidos, la muestra utilizada y las condiciones en las cuales se realizó la investigación. Esta primera parte permite al lector conocer el contexto global de la enseñanza de lenguas en el país y vislumbrar algunas de las condiciones que propician el intercambio de experiencias educativas. La metodología descrita corresponde a una investigación de índole documental, aunque la localización de la información requirió, en algunos casos, de trabajo de campo. De su lectura surgen varias observaciones: Por otra parte, habría sido de ayuda para los lectores disponer de un marco teórico relativo a los paradigmas que dan origen a la variedad de metodologías y técnicas utilizadas en este campo de indagación (positivista, pospositivista, teórico crítico y constructivista). La segunda parte –la más extensa– contiene el panorama de la investigación en los estados de Baja California, Baja California Sur, Campeche, Tabasco, Quintana Roo, Yucatán, Chiapas, Colima, Jalisco, Puebla, Sonora, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas. En general, la metodología que los autores adoptaron en esta investigación es semejante a la que se menciona en la primera parte del libro, con variantes propias del contexto institucional o estatal, y conforme a la estrategia diseñada por el coordinador del proyecto para hacer posible la comparación entre estados. Para dar cuenta de los estudios realizados, los autores consultaron fuentes diversas, principalmente tesis de licenciatura (en su mayoría) o posgrado, ponencias en memorias y proyectos de investigación en curso con más de 50% de avance. Para ello, elaboraron fichas y crearon una base de datos. Asimismo, varios de ellos realizaron entrevistas a informantes clave, como directivos, coordinadores, profesores y bibliotecarios. Los autores realizaron un análisis crítico con diferente grado de profundidad y rigor de los idiomas, temas, marcos referenciales, metodologías y resultados de las investigaciones localizadas en cada estado. En total se describen 264 estudios, provenientes en su mayoría de programas de licenciatura o maestría de muy reciente creación. A manera de ejemplo, en los capítulos siguientes encontramos: En suma, los trabajos de investigación realizados, de acuerdo con este libro, son básicamente de tres tipos: encuesta, estudios de tipo cualitativo y mixtos. Los temas abordados se refieren en su mayoría a la enseñanza de habilidades y subhabilidades, estudios lingüístico-didácticos, estrategias y estilos de aprendizaje, métodos y técnicas o evaluación. Respecto a esta segunda parte, encontramos que en algunos casos sería menester describir con mayor detalle y profundidad la información relativa a los temas y marcos teóricos utilizados para fundamentar los estudios. También sería recomendable hacer las referencias bibliográficas conforme a los lineamientos de la American Psychological Association (apa o Asociación Americana de Psicología) u otros modelos que se consideren adecuados. Asimismo, habría que realizar una cuidadosa revisión de estilo. En la tercera y última parte se incluyen dos capítulos. En el primero Reyes y Rodríguez retoman el panorama nacional a partir de los resultados obtenidos; en tanto que Ramírez, Roux, Moreno, Reyes, Rodríguez, Ramírez y Zhizhko en el segundo, concluyen con la evaluación y valoración de la investigación en el campo. Coincido con Pía María White, quien en el prólogo enfatiza que: Este ejemplar nos ofrece la oportunidad de conocer las condiciones en las que se han realizado los proyectos, sus limitantes y ausencias, así como sus fortalezas y las recomendaciones que hay que seguir para hacer investigación de calidad que beneficie la enseñanza, el aprendizaje y el desarrollo del conocimiento. En esta era globalizada es verdaderamente necesario pensar en la investigación no sólo como fuente de información para el mejoramiento de la docencia, sino como el vehículo para optimizar sus alcances, en un país como México tan necesitado de mejora en todos los ámbitos (p. 12). Las recomendaciones que los autores de este libro hacen para mejorar la calidad de estudios posteriores son muy atinadas, relacionadas con los proyectos de investigación, con los sujetos que investigan y con las condiciones en las cuales se hace investigación. Por ello, resulta un trabajo colegiado que ciertamente habrá de incidir en el avance de la investigación en el área de la enseñanza y el aprendizaje de lenguas extranjeras en las instituciones de educación superior de los estados incluidos en el estudio. Y en la medida que más actores se sumen a la tarea de recabar, analizar e integrar los datos del resto del país, y difundirlos en distintos foros se logrará una reflexión más completa sobre las fortalezas y debilidades de los trabajos de investigación realizados de En Las investigaciones sobre la enseñanza y el aprendizaje de lenguas extranjeras en México los autores exponen de manera sucinta los temas, marcos teóricos, metodología y resultados obtenidos, información muy rica para el establecimiento de redes de investigadores y para despertar el interés de los docentes de lenguas, en conocer estos estudios y prepararse para emprender investigación sobre su quehacer. A la vez, los autores nos proponen nuevas tareas por realizar, al hacer evidente la necesidad de un mayor rigor tanto en los diversos eventos académicos, como en las publicaciones que ya existen en el área para la difusión de los resultados. Nos ofrecen también un análisis de la situación de la enseñanza y el aprendizaje en las instituciones de educación superior de 15 entidades federativas y de sus ofertas educativas para la formación docente. Es decir, parten de estudios realizados en el siglo anterior y crean una línea base de conocimiento al inicio de este milenio, que hará posible observar tendencias de la investigación educativa en los próximos años y para el mejoramiento de los programas de licenciatura y posgrado del área de la enseñanza de lenguas. Asimismo, descubren ante el lector temas de interés para estudios posteriores que contribuyan a la necesaria discusión de resultados y la conformación de políticas para la formación de investigadores en el área. Pero, sobre todo, apuntan la necesidad de realizar más y mejores estudios para la solución de problemas educativos y sociales, una de las acciones fundamentales que la investigación educativa tendría que generar. Este libro representa un gran esfuerzo que da cuenta de la situación del área de lenguas extranjeras en nuestro país, en la que aún existen carencias, como la necesidad de que los programas de licenciatura sean impartidos por profesores con posgrado, y que estos profesionales cuenten con horas para planear, realizar y difundir sus estudios en publicaciones diversas. Para concluir, retomo las palabras de Ramírez, Roux, Romero, Ramírez y Zhizhko en el último capítulo, al referirse al estado de la investigación en los 15 estados de la república reportados: La actividad es incipiente, las limitaciones son muchas y las fortalezas endebles. Sin embargo, el campo de la enseñanza y el aprendizaje de las lenguas extranjeras en México es joven y dinámico, y se vislumbra un futuro promisorio en el cual nuestra disciplina se eleve por su calidad y prestigio al nivel que le corresponde (p. 37). Para los profesores y profesoras de lenguas del país que desean investigar, pero que no cuentan con las herramientas necesarias para emprender el estudio de algún problema de su práctica, el libro Las investigaciones sobre la enseñanza y el aprendizaje de lenguas extranjeras en México, sin duda, será un referente obligado. Para los formadores, quienes desean fortalecer, e incluso tal vez, repensar su bagaje epistemológico, metodológico y teórico a través del intercambio de experiencias con otros colegas, el libro que nos ocupa constituirá una fuente de reflexión respecto al papel de la investigación en los programas de licenciatura o posgrado en los que participan. Así como para la autoevaluación de la investigación que realizan y las tesis que dirigen; particularmente en lo concerniente a los paradigmas de investigación y los marcos teóricos, que requieren discusión al interior de cada institución. Ahora el compromiso pasa a los profesores, investigadores y formadores del área de lenguas en México, para conocer los resultados, discutirlos y emprender acciones que conduzcan a elevar la calidad de su enseñanza a través de la investigación en sus respectivos contextos educativos.
Para citar este artículo, le recomendamos el siguiente formato:
Gilbón. D. M. (2008). Avances en la investigación sobre la enseñanza de lenguas extranjeras en las IES de 15 estados de la República Mexicana (2000-2005) [Reseña del libro: Las investigaciones sobre la enseñanza y el aprendizaje de lenguas extranjeras en México]. Revista Electrónica de Investigación Educativa, 10 (1). Consultado el día de mes de año en: http://redie.uabc.mx/vol10no1/contenido-gilbon.html |